sábado, 28 de noviembre de 2009

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Y la princesa se cansó de dar vueltas sin rumbo, se salió de la espiral en la que estaba sumergida y se dispuso a comerse el mundo. Sin embargo, era tanto el tiempo que llevaba perdida que se sentía desbordada por todo lo que sucedía a su alrededor.

Las luces, los colores, las formas... eran capaz de maravillarla y ahogarla al mismo tiempo. El tic-tac de su corazón volvía a recordarle que estaba viva, y que volvía a funcionar por sí mismo. Sin embargo, era tanto el tiempo que había pasado funcionando con ayudas externas que a veces se detenía, y, por un momento, la princesa se quedaba sin respiración, sin saber como actuar.

Las bocanadas de aire son tan puras que necesita mezclarlas con nicotina para que su cuerpo pueda asimilarlas y diluirlas entre sus sentimientos. Los recuerdos se amontonan y van convirtiéndose en un peso que la aprisiona y la va consumiendo por dentro. Pero entonces toma aire suavemente, dibuja una sonrisa en su rostro y recuerda lo que es...

............................................................................una princesa =)

domingo, 15 de noviembre de 2009

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Como bien decía una canción que marcó mi infancia (aunque ya un poco entrada en años) "una historia siempre tiene dos finales, el tuyo y el mio"; y no, "no recuerdo cuantos daños celebrales causamos los dos".

Solo sé que voy a recuperar lo que siempre fui y he perdido, y luchar por volver a recuperar la sonrisa que, ya no sé si me robaste, o dejé que se fuera yo sola.


Sea como fuere, solo deseo que seas feliz, que yo también voy a serlo.





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